Cada inicio de curso es una mezcla de ilusión, planificación y algo de caos.

Para muchos docentes, septiembre no empieza con los alumnos en el aula, sino con una lista interminable de cosas por preparar: horarios, grupos, dinámicas, decoraciones, reuniones… Y en medio de todo eso, hay un aliado silencioso que marca la diferencia: el material escolar y la papeleria.
No hablamos solo de bolígrafos y rotuladores, sino de herramientas que ayudan a enseñar mejor, organizarse, ahorrar tiempo y motivar a los alumnos. Aquí te dejo los 10 materiales que no deberían faltar en la mochila (ni en el aula) de ningún profe al arrancar el curso.
1. Agenda docente: tu cuaderno de mando
Parece obvio, pero una buena agenda escolar pensada para profesores es más que un sitio donde apuntar fechas. Es una herramienta para tener todo bajo control: reuniones, evaluaciones, tareas pendientes, ideas para actividades, incluso el estado emocional de la clase. Te recomendamos la marca additio como Cuaderno del Profesor.

👉 Algunos profes prefieren las agendas digitales, pero muchas siguen optando por las de papel porque permiten anotar rápido, hacer esquemas y llevarlas encima sin distracciones. Si puedes elegir, busca una que tenga:
- Calendario semanal y mensual
- Espacios para anotar objetivos
- Seguimiento de alumnos
- Listas de tareas y reuniones
Una buena agenda no solo te organiza, te ayuda a descargar la cabeza.
2. Rotuladores y subrayadores para todo
No hay profe sin rotus. Es así. Para corregir, para hacer esquemas, para escribir en la pizarra, para decorar la clase, para los carteles… Y no todos valen igual.

¿Qué deberías tener en tu estuche al empezar el curso?
- Rotuladores permanentes para etiquetar material, carpetas o cajas.
- Subrayadores de varios colores para destacar en apuntes o corregir.
- Rotuladores para pizarra blanca, preferiblemente de punta fina y sin olor fuerte.
- Rotuladores tipo pincel (si haces lettering, carteles o decoras espacios).
También son muy útiles los que tienen punta doble: fina para escribir y gruesa para destacar o dibujar.
Y recuerda algo importante: invierte en calidad. Unos buenos rotuladores duran mucho más y no secan tan rápido.
3. Sellos motivadores: un clásico que funciona
Los sellos con mensajes positivos no son solo un adorno. Ayudan a reforzar conductas, motivar, hacer que las correcciones sean más visuales… y a los peques les encantan.

Hay desde los clásicos de “¡Muy bien!” hasta algunos más originales como “Revisa de nuevo” o “Sigue así”. Si das clase a infantil o primaria, son casi obligatorios. Pero incluso en cursos más altos, se pueden usar con humor o con mensajes personalizados.
👉 Consejo extra: algunos profes usan sellos personalizados con su nombre o frases típicas que dicen en clase. Es un detalle que los alumnos recuerdan.
4. Cajas y organizadores: que no te coma el desorden
Un aula bien organizada ahorra tiempo y reduce el estrés. Tener cajas, archivadores, separadores o bandejas puede parecer un detalle sin importancia, pero cuando tienes varios grupos, montones de actividades, fichas, trabajos… la diferencia es enorme.

Algunos imprescindibles de organización para profes:
- Carpetas por grupo o asignatura
- Cajas pequeñas para fichas, tarjetas o juegos
- Organizadores de sobremesa para bolis, tijeras, clips…
- Bandejas de entrada/salida para corregir
- Bolsillos colgantes para guardar tareas o materiales de alumnos
Además, si tienes espacio visible, puedes añadir etiquetas claras con iconos o colores. Facilita mucho la autonomía del alumnado.
5. Recursos imprimibles (sí, antes del caos)
Muchos profes empiezan el curso descargando a toda prisa carteles, listas, plantillas… y acaban imprimiendo todo en el último minuto. Pero si te preparas en agosto o primeros de septiembre, puedes tener ya listo. Y recuerda que siempre recomiendo las impresoras ecotank de Epson.

- Horarios para rellenar con alumnos
- Fichas de presentación
- Rúbricas para evaluar
- Plantillas para seguimiento de tareas o lectura
- Pósters con normas del aula
💡 En Kumubox tienes una gran selección de recursos listos para imprimir, clasificados por curso, materia y nivel. Un consejo: crea una carpeta en tu ordenador solo para materiales imprimibles del curso y ordénala por temas. Te ahorrará tiempo cada mes.
6. Kit básico de supervivencia para el profe
No es material escolar como tal, pero es parte del día a día. Algunos elementos que muchos profes no llevan el primer día… y luego echan de menos:
- Un mini botiquín con tiritas, ibuprofeno o algo para la garganta
- Un termo o botella reutilizable para tener agua o té a mano
- Cacao para los labios (sí, lo vas a usar más de lo que crees)
- Snacks o galletas para cuando no llegas al recreo
- Gafas de repuesto, si usas
Este “kit de profe” puede ser una cajita en tu mesa o mochila. Parece una tontería, pero te salva el día.
7. Material para dinámicas y juegos rápidos
Tener a mano material para actividades express te puede ayudar muchísimo. No todo tiene que ser evaluaciones o fichas. A veces, lo que más recuerdan los alumnos son las pequeñas dinámicas con reglas sencillas.

- Dados
- Tarjetas en blanco para escribir palabras
- Reloj de arena o cronómetro
- Mini pizarras o paneles para grupos
- Palitos de madera con nombres de los alumnos (para sacar aleatoriamente)

¿Qué cosas conviene tener por clase?
Puedes usarlos para repasar, hacer equipos, romper el hielo… No ocupan nada y dan mucho juego.
8. Carteles y decoración del aula
Decorar el aula no es solo ponerlo “bonito”. Tiene un valor funcional y emocional. Un espacio bien ambientado ayuda a que los alumnos se sientan más cómodos y comprendan mejor lo que se espera de ellos.
Algunos carteles útiles para colocar desde el inicio:
- Normas de clase
- Calendario del mes
- Frases motivadoras
- Pizarra de objetivos
- Panel de asistencia o tareas
💡 Consejo: si puedes, deja que el alumnado también participe en la decoración. Ayuda a crear vínculo con el espacio y a cuidarlo.
9. Bolsas, maletines o carritos para moverte entre aulas
Si das clase en diferentes espacios o cambias de aula a menudo, necesitas un sistema cómodo para moverte con todo tu material. No te compliques con cinco bolsas diferentes. Mejor un maletín con compartimentos o incluso un carrito con ruedas.

Hay carritos muy prácticos y ligeros, con bandejas o compartimentos que te permiten llevar rotus, papeles, sellos y todo lo que necesitas en una sola vez. Lo agradecerás en el segundo día de curso.
10. Material de refuerzo para los alumnos
Siempre viene bien tener a mano algunas cosas “extra” para los alumnos: desde lápices o gomas por si alguien olvida el suyo, hasta fichas o juegos de repaso por si termina rápido.
No se trata de tener una papelería en el aula, pero sí de contar con:
- Lápices, gomas, sacapuntas de repuesto
- Tijeras y pegamento
- Actividades imprimibles por niveles
- Juegos para trabajar vocabulario, mates, atención…
Todo esto lo puedes organizar en una caja etiquetada tipo “material común”. Les enseñas a usarlo con responsabilidad y te ahorra muchos “profe, no tengo…”.
Para terminar…
Empezar el curso con el material adecuado no es una cuestión de capricho, es una forma de cuidarte a ti mismo como docente y de preparar el entorno para que tu trabajo fluya mejor.
No necesitas tenerlo todo desde el primer día, pero contar con una buena base te da margen, tiempo y tranquilidad. Porque cuando tú estás organizado, puedes dedicarte a lo más importante: enseñar, conectar y disfrutar del aula.
¿Y tú? ¿Cuál es tu material 100% necesario? ¡Te leo en comentarios!